Cine actualidad/ “ALITA, ANGEL DE COMBATE”
Yo fui un cyborg adolescente A menudo envidio la facilidad que tienen algunos amigos para sumergirse en una película (casi siempre, de ciencia ficción) y simplemente dejarse llevar: permitirse ser introducidos en un mundo de fantasía, involucrarse tanto en la trama que, más que presenciar los hechos narrados, son casi partícipes de ellos. A mí eso no me sucede casi nunca, por más que lo intento; sin poder evitarlo, veo o escucho algo que me descoloca y, mientras el argumento avanza, yo he seguido mirando desde fuera, pero no participando en el meollo. En el caso de “ Alita, Angel de Combate ”, me encontré con un hándicap que me resultó insalvable: los ojos de la protagonista.