Series de televisión/ "FROM"
En un pueblo perdido en alguna
parte indeterminada de Estados Unidos, el sheriff
Boyd (Harold Perrineau) patrulla por
las calles polvorientas tocando una campana justo antes de la puesta de sol,
conminando a todos los habitantes a que se encierren en sus casas de inmediato. Unos minutos antes, la familia Matthews (Jim,
Tabitha, Julie e Ethan), que recorre ingenuamente esa parte del país a bordo de
su roulotte, encuentra en su camino
un árbol caído que les impide el paso y les obliga a retroceder, recalando en
el pueblo antes citado del que, por mucho que lo intentan, ya no podrán
salir. Porque de eso se trata, al fin y
al cabo, de una suerte de alusión a la buñueliana
“El ángel exterminador”, una
situación opresiva, un bucle interminable del que no se puede escapar. Por si fuera poco, en el instante en que
anochece, del espeso bosque circundante surgen unas amedrentadoras criaturas
con apariencia humana que masacran salvajemente a todo aquel que se cruza en su
camino. El arranque de ”From” es espléndido, inolvidable y
adictivo. Pocas veces se ha visto tanta
violencia y tan gore, y con una niña
inocente como impensable víctima.
Parecería que esos brotes sanguinarios van a ser la constante, pero cada
vez se van espaciando más y más, y mucho más…
Como contrapartida, la serie cuenta con una fauna de personajes con los
que no puedes evitar empatizar, así como con la espléndida caracterización de
sus actores, con mención especial al sacerdote Padre Khatri (Shaun Majumder), la carismática Donna,
líder de quienes se refugian en una finca alternativa conocida como La Colonia
(Elizabeth Saunders), el ya citado
Jim Matthews (Eion Bailey), deseoso
de buscar una explicación donde parece no haberla, la desquiciada Sara,
¿víctima o villana? (Avery Konrad),
la abnegada doctora Kristi (Chloe Van
Landschoot) o el desconcertante Victor (Scott McCord), la persona que más tiempo lleva prisionera en la
dantesca villa.
La primera temporada de “From” consta de diez episodios, en la
mayoría de los cuales no pasa nada, pero estás tan enganchado a sus personajes
y a su hipnotizador misterio que la inacción acaba no suponiendo ningún problema. Entonces, dosificadas con cuentagotas,
acontecen algunas megaestupendas escenas de acción que te hacen flipar y babear
(el ata que a La Colonia es
extraordinario), y, por encima de todo, el maravilloso sheriff al que da vida
Harold Perrineau (ayudado por el fantástico doblaje de Eduardo del Hoyo) se convierte en la gran atracción, el gancho al
que te aferras inconscientemente. Sin
darte cuenta, con una última entrega en la que no se resuelve ninguna trama y
todo queda en el aire, la temporada Uno se acaba, y la Dos comienza como si se
tratase simplemente del episodio número once, y nuevamente con los mismos
títulos de crédito ilustrados con la oscura versión del “Qué será, será” de la hitchcockiana
“El hombre que sabía demasiado” que
realizan The Pixies. En realidad, parece que nos hallamos ante una
prolongación de lo ya conocido, que sigue las mismas pautas y apenas se limita
a aportar algunos personajes nuevos (los pasajeros de un autobús) y a acumular
misterios sin explicación y teorías descabelladas que pretenden desentrañarlos.
Soy de los que prefieren una
ambigüedad inteligente a una explicación estúpida. Vamos, mil veces. Por fortuna, al final de la segunda temporada
de “From” todavía no se ha producido
ninguna revelación alucinada, y por tanto cabe la esperanza de que la tercera
temporada mantenga con vida a los mejores personajes (¡qué pena que ya no vaya
a estar el monstruo sonriente que bordaba el actor Jamie Maguire!) y siga deleitándonos con buenos diálogos aderezados
con momentos granguiñolescos que nuestro entrañable Sheriff Boyd sabrá cómo
reconducir con su inacabable y peculiar sentido común.
Comentarios