Asfixiar a Dios
¡Qué ingratos, los seres vivos…! La sabia Naturaleza pone a su disposición la
posibilidad de alimentarse con los manjares más apetitosos y sobre todo más
deliciosamente aromáticos… y ellos, los
muy cabrones, se lo pagan inundándola con excrementos de execrable apariencia
y, sobre todo, pestilente aroma… Ya lo
decía mi madre: “Comerás gloria, pero….”
La siguiente anécdota, real como
la vida misma, acaeció pocas fechas atrás, pero bien hubiera podido suceder en
cualquier momento de la longeva Historia humana…
Apretado por inaplazable
necesidad, había accedido al cuartito con el tiempo justo y preciso para vaciar
las desechables sustancias en la taza al efecto. ¡Qué alivio se experimenta al depositar tal
cantidad de lastre y, tras un segundo de relajo, tirar vengativamente de la cadena…! A continuación, tocaba levantarse, y la
costumbre (que suele desembocar en ley) dictaba dejar la puerta del excusado
entreabierta, para que los pútridos olores no exterminasen a las inocentes
bacterias autóctonas. El reducto
conocido como “WC” (iniciales británicas de “Water Closet”) desembocaba en una
zona común en la que se hallaban dos urinarios de pared y el lavabo, y tal
emplazamiento, entre machos saciados de su necesidad, podía llegar a resultar
tan concurrido como la mismísima plaza del pueblo. Así pues, mientras el agua caía sobre las
manos y éstas se desteñían de la lechosa capa de jabón, un compañero accedió al
lavadero y pareció que éso podía merecer el inicio de una conversación. Mas no había iniciádose la charla cuando el
recién llegado, afectado por una repugnante fetidez a la que su autor ya se
había habituado, bramó airado: “¿QUIERES
CERRAR ESA PUERTA, QUE SALE UN TUFO QUE SE ASFIXIA DIOS?” y, acto seguido,
incapaz de culminar la humana función que le había traído a tal dependencia, salió
de ella como quien huye de la peste (nunca más oportunamente empleada la
metáfora).
Con los ojos como platos y las
mejillas como tomates, al “ofendido” sólo le quedaba agachar la cabeza y rezar
fervientemente para que del cielo no cayera una deidad asesinada por
obstrucción respiratoria nasal aguda…
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