La COPE, expulsada del EGM

Se veía venir: después de los sucesos que comentábamos aquí hace unos días (un equipo de periodistas comandados por José Antonio Abellán, actual director de los programas deportivos de la cadena de los Obispos, habían falsificado los resultados del Estudio General de Medios), la comisión gestora encargada de realizar y publicar el EGM ha decidido, por mayoría absoluta, expulsar a la COPE del ámbito dicho estudio. Recordemos que el famoso “Estudio General de Medios” es un baremo que sirve de base a publicistas y anunciantes, y afecta a emisoras de radio, periódicos y televisiones. Durante la asamblea celebrada ayer, la casi totalidad de los miembros de la comisión votaron a favor de la expulsión de la antaño conocida como “Radio Popular” (ahora que lo pienso, tal vez hubiese sido demasiado obvio mantener ese nombre en las actuales circunstancias), con la excepción de medios de comunicación afines al PP, tales como el Diario “El Mundo” y algunas televisiones autonómicas.

Hay quien opina que la COPE no actuó del todo ilícitamente, ya que Jesús de Polanco, propietario de empresas como el diario “El País” y la Cadena SER, es, al parecer, dueño también de una institución que elabora encuestas para el EGM. Yo desconozco si es verdad o no que Polanco extiende su largo brazo al terreno de los sondeos demoscópicos, pero lo que sí es cierto es que en todos los medios de comunicación que pude escuchar o visionar ayer y en todos los que he leído hoy se da o se dio cuenta de la expulsión de la cadena episcopal, luego se trata de una información veraz y contrastada, adoptada en base a unos hechos inequívocamente probados. ¿Me parecería bien, en caso de ser cierto, que un empresario cuyas empresas son sondeadas tomase parte en la elaboración de los sondeos? Obviamente, no. Pero tampoco me pareció bien (y ésto sí es un hecho) que periodistas de una determinada emisora tomaran parte en la realización de un fraude.

Tal vez, a lo largo de estos meses, os haya dado la impresión de que no me gusta el estilo de la COPE. Y es cierto. He colaborado con ellos, aunque externamente (mi programa radiofónico se emitió durante un tiempo en esa cadena), como también he colaborado con otras emisoras más o menos conocidas (entre ellas, por cierto, la SER). Pero cuando digo que no me gusta su estilo no me refiero a actitudes directamente referidas a mí, sino generalizadas. A lo que me refiero es a su forma de entender la comunicación, a la ideología que no ocultan (y que tal vez no tienen por qué ocultar). Personalmente, me cansa que, al abordar cualquier tipo de información, por muy local o intrascendente que sea, se termine invariablemente por descalificar al partido actualmente en el gobierno, y casi siempre con fuertes acusaciones y con insultos a menudo no sólo insinuados. Me irrita el tono ofensivo, tremendista y apocalíptico de alguno de sus comentaristas más destacados (y esta vez no voy a dar nombres). Me desagrada que en ciertos programas se publicite la edición de libros en los que se presenta la homosexualidad como “una enfermedad curable con terapia” (esto lo oí yo en dicha emisora el pasado verano). Y, por mucho que me guste la Semana Santa, me aburre soberanamente que cada dos por tres se esté hablando de la Iglesia, del Papa y de la muy respetable Conferencia Episcopal. Vosotros me diréis: “Pues, si no te gusta, cambia de cadena”. Y yo os contestaré: “Eso es precisamente lo que hago”.

Si en algún momento de este artículo (o en cualquier otro anteriormente publicado aquí) habéis interpretado que os conmino o invito a dejar de sintonizar la COPE, os presento mis excusas, porque jamás ha sido ésa mi intención. Podéis y debéis esgrimir vuestro legítimo derecho a pensar como os venga en gana y a informaros y entreteneros de la forma que más os plazca. Eso, amigos, es lo mismo que hago yo. Con todos mis respetos.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
EFECTIVAMENTE..estás mal imformado.Las heces gustan a millones de moscas y este no es un dato que demuestre la la bondad de comerlas. No debe haberte ido muy bien en el periodismo y debes estar fuera de mercado, si estuvieras dentro sabrias la verdad y esta es que el imperio Polancone intenta ocultar haciendo de un buen ataque la mejor defensa o lo que es lo mismo, les han pillado con los pantalones bajados y en lugar de dimitir quien corresponda como seria de ley en un pais civilizado y rectificar...hacen de la calumnia y la falsedad su moneda de cambio. Este EGM es una chapuza y Abellan lo ha descubierto con trabajo y actas notariales, por eso su empresa le secunda...pese a quien le pese
Anónimo ha dicho que…
Es cierto, el periodismo me fue fatal, tanto que ni siquiera lo ejercí. Es decir, sí, he colaborado ocasionalmente con algunos diarios y emisoras de radio, pero tales medios de comunicación bastante hicieron con permitirme "matar el gusanillo" llenándoles páginas y horas de programación. En cuanto a que "si no estoy dentro del mundillo periodístico no puedo saber la verdad"....... ¿Qué quieres que te diga? Tal vez tengas razón y yo soy uno de los miles de ilusos que, sin vivir dentro de ese mundo, creen que por leer un par de periódicos y escuchar un par de emisoras de radio están más o menos al día de la actualidad. La Verdad, querido amigo anónimo, es a veces un concepto inabarcable, y suele haber muchas pequeñas verdades. Yo en mis textos trato de congeniar algunas de ellas, y después doy mi punto de vista (que es subjetivo, claro está). Por cierto, ¿a tí te consta fehacientemente que José Antonio Abellán actuó tan heroicamente como dices, actas notariales en mano? Seguramente tú sí estás dentro del mundo del periodismo y tienes acceso a fuentes que yo desconozco. Sinceramente, gracias por tu aportación, no dejes de participar.

Entradas populares de este blog

Banda Sonora: "PIRATAS DEL CARIBE, La Maldición de la Perla Negra"

Recordando a... Supertramp

La historia de Village People