Cine actualidad/ "EL METODO KNOX"
John
Knox es un competente asesino a sueldo que ha comenzado a experimentar
episodios de pérdidas de memoria. Entre
asesinato y asesinato, visita al neurólogo y éste le dice que padece
la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, un proceso degenerativo que en muy poco
tiempo le va a causar daños cerebrales más profundos que los del
Alzheimer. Knox dispone de apenas unas
semanas para solucionar todos sus temas pendientes, teniendo de paso que ayudar
a su hijo, al que hacía años que no veía, a solucionar un error que podría
costarle la cárcel…
Uno de
mis actores favoritos nació bajo el nombre auténtico de Michael Douglas, pero,
como otro compañero de profesión se le había adelantado a la hora de registrar
ese apelativo (y eso que el Michael Douglas al que todos conocemos, hijo del
también actor Kirk Douglas, en realidad se llama Michael Danielovitch), se vio
obligado a modificarlo, eligiendo como pseudónimo artístico el de Michael Keaton, en homenaje a la
estrella del cine mudo Buster Keaton.
Michael Keaton se dio a conocer al gran público gracias a sus trabajos
con Tim Burton “Bitelchus” y sobre
todo “Batman”, y, desde entonces, se
ha labrado una carrera muy sólida como intérprete. En el año 2008 debutó como director con “Caballero y asesino” y ahora, con “El método Knox”, nos acaba de presentar
su segundo film como realizador.
Creo que lo único
que no me gustó de “El método Knox”
fue la inevitable comparación con “La
memoria de un asesino”, un film protagonizado por Liam Neeson hace un par
de años, que tiene una temática sospechosamente similar y que, en conjunto, me
resultó más gratificante. Por lo demás,
creo que Michael Keaton ha realizado un trabajo más que correcto detrás y,
sobre todo, delante de la cámara. Este
actor me parece un prodigio interpretativo, cómo gesticula y cómo se mueve, y,
justo es decirlo, también ayuda mucho la oscura labor de su doblador habitual Manolo García. En cuanto a la historia, la progresiva
pérdida de memoria que sufre el protagonista hace que los espectadores acabemos
sufriendo también una especie de amnesia, y no nos importe que se trata de un
asesino despiadado, sino su condición de persona que sufre y que, antes de que
su mente se quede en blanco, intenta hacer lo correcto y, a su manera, se
esfuerza por asegurar el porvenir de su familia. Entre los secundarios cabe destacar a James Marsden, que interpreta al hijo
de Knox y a un poco menos que ridículo Al
Pacino, a años luz de sus gloriosas interpretaciones de hace décadas. Por lo demás, me resultó una grata sorpresa “El método Knox”, la enésima prueba de
que no tenemos que olvidar (nunca mejor dicho) que, con un buen guión, una
dirección acertada y un actor glorioso encabezando el reparto, el resultado
suele ser satisfactorio.
Luis Campoy
Calificación: 7,5 (sobre 10)
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