Por el pueblo pero de espaldas al pueblo


Verano, verano, época de calor….. Parece que nuestra clase política, no contenta con las elevadas temperaturas de las que disfrutamos, sigue empeñada en provocar el calentamiento global de las mentes y los temperamentos propios y ajenos. Creo que todos sabéis que, en el caso de poder considerárseme cojo de ideología, mi cojera no me acercaría precisamente al lado en el que uno se considera diestro. Pero, una vez más, lamento con callada indignación el modo en que ciertas decisiones y actitudes zapateriles le proporcionan a las huestes pseudoneofascistas tantos argumentos para el ataque visceral más corrosivo y erosionante. Es decir, tal y como están las cosas y faltando tan poco como falta para las próximas Elecciones Generales, ¿por qué el Ejecutivo comete tantos y tan continuados errores de cara a la más amplia galería de españoles? Para empezar, me parece una estupidez el haberse apartado del fasto colectivo que conmemoró el décimo aniversario del asesinato de Miguel Angel Blanco Garrido. Independientemente de su propia ideología, Blanco es, diez años después, mucho más que un concejal asesinado: se trata de un héroe, un mártir, un mito. Sin apenas ser consciente de ello, aglutinó en torno a su agonía a casi la totalidad de las fuerzas democráticas y a millones y millones de personas que se atrevieron a exigir su liberación y, días después, condenar su brutal asesinato. ¿Por qué el gobierno socialista no ha desarrollado un papel más activo en los actos conmemorativos? ¿Por qué se les ha dado pie a los peperos para perseverar en su cruzada de concienciación de la opinión pública de que los socialistas prefieren pactar con los terroristas antes que ponerse del lado de sus víctimas?. Pero no es sólo eso. Al mismo tiempo, se produce una versión insular del lamentable caso del “Prestige”, y una nueva marea negra amenaza con barrer las costas de Ibiza, ahuyentando, de paso, a gran parte de los turistas, que se ven obligados, si no a abandonar la isla, sí a bañarse en playas no contaminadas pero muy alejadas de los hoteles que habían contratado. El que un barco naufrague y vomite miles de litros de porquería negruzca y pegajosa no es culpa de nadie, pero sí lo es la inacción, la respuesta retardada, la actuación chapucera. La chapuza es casi peor que el chapapote. Los efectivos que se enviaron no fueron los necesarios, llegaron mal y tarde y, para más INRI, la superministra de Medio Ambiente, la muy cuestionada Cristina Narbona, tardó cuatro días en hacer acto de presencia en la zona. ¿Nadie se dio cuenta de que la imagen gubernamental iba a quedar más ennegrecida que la propia arena ibicenca?. Parece que no, porque, en un aparente intento de ensuciar aún más su ya patética imagen pública, llega el día del bautizo de la segunda hija de los Príncipes de Asturias y Zapatero se va de vacaciones (perdón, visita público-privada) a México. Vale que, con todo su derecho, nuestro Presidente puede ser poco monárquico o muy republicano, pero no es muy sensato que todas sus actuaciones supongan y presupongan una constante bofetada a un amplísimo sector de población ya muy “tocado” por determinadas medidas (libertad abortiva, divorcio express, matrimono y adopción por parte de parejas homosexuales, disminución del poder e influencia de la Iglesia, etc.) que pueden resultar muy “liberales” pero a muchos les resultan tan agradables como una patada en los mismísimos. Con muy poco sentido de la oportunidad, el hecho es que nuestro máximo mandatario se permite hacerle un desprecio al futuro Rey de España, al mismo tiempo que su ministra tarda cuatro días en ir a limpiar el chapapote balear y coincidiendo con la enésima demostración de que a las víctimas del terrorismo se les hace menos caso que a las demandas del etarra De Juana. De verdad que jamás votaré a un partido de derechas y me disgusta profundamente el modo en que Rajoy está llevando a cabo su oposición, pero… ¿qué queréis que os diga?, si esta es la mejor política socialista que puede llevar a cabo un gobierno de izquierdas, de verdad que dan ganas de irse de vacaciones y no volver.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
y más...y más... y más...y más...
¡¡¡QUE RAZÓN TIENES!!!...Y NO ES QUE TE DÉ LA RAZÓN POR QUE ME GUSTA COMO ESCRIBES, ESQUE LA TIENES.

A VECES UNA SE PREGUNTA...¿EN EL GOBIERNO, SEA QUIEN SEA QUIEN GOBIERNE, NO HAY INTELIGENCIA? QUE YO SEPA TIENEN UN DEPARTAMENTO QUE SE OCUPA SOLAMENTE DE LA MISMA, PERO DE LA INTELIGENCIA DE QUIEN?.

UN BESO AMIGO.
MARISA
Ángel ha dicho que…
Muy buenas, Campoy.

Fíjese que "en el caso de poder considerárseme cojo de ideología, mi cojera no me acercaría precisamente al lado en el que uno se considera zurdo".

Pero es que la ideología es una cosa y las personas que dicen reprsentarla es otra. A ver si ahora va a resultar que el PSOE es socialista.

En cualquier caso, no estoy de acuerdo con la oposición del PP y en mi blog les he dado tantos o más palos que al PSOE.

Lo que ya me ofende es que por pensar diferente se me considere parte des las "huestes pseudoneofascistas". Es una declaración un tanto radical e incluso impropia... ¿de la izquierda?

No sé, igual soy yo que estoy un poco sencible...

Saludos
Anónimo ha dicho que…
Tranquilo Luis, que el gobierno cometerá muchos errores, pero desafortunadamente (afortunadamente para otros), la memoria colectiva los ignora o los olvida con una facilidad... Parece que la memoria y el perdón de la mayoría también son cojos de la pierna izquierda.
Anónimo ha dicho que…
Hi Luis! A pesar del verano, de vivr en Tenerife y del calor sigo siendo fiel a tu blog, la verdad no sé porqué de este blog sí y de otros no, pero es el único blog que leo habitualmente... pero bueno. Quería aprovechar para decirte que tienes razón en lo que dices, pero no sé a que te refieres cuando llamas a los afines (o votantes, que no siempre es lo mismo) del PP "pseudoneofascistas", englobando en un saco a casi la mitad de la población española bajo un apelativo claramente ofensivo e incluso ilegal. Ovbiando términos tan claramente despectivos como "peperos" creo que deberías de ser conciente de que no todo el mundo tiene las mismas ideas, incluso dentro de los votantes a un mismo partido.
No creo que sea un buen camino ese el de referirse a otra u otras personas con términos que crean ese distanciamiento y esa tensión de la que hablabas más atrásy que estaban polarizando a la sociedad española.
Debo decirte que lo bueno de tener una postura de centro es que no se cojea, ni para un lado ni para otro, pero al igual que no me refiero a los/las socialistas como soviéticos, comunistas, rojos, bolcheviques o demás términos que, no olvidemos, también pueden recordar a tendencias dictatoriales y antidemocráticas (la URSS del camarada J. Stalin o la cuba del camarada F. Castro) tampoco me gusta que se refieran a un sector de la población bastante amplio como pseudoneofascistas, xq a parte de ser erróneo conceptualmente, y de ser ofensivo, puede llevar a equivocaciones a mucha gente, y no lo digo ya por tí y lo que escribes, ya que es tu blog y tienes total libertad para escribir lo que se te antoje, sino porque eso de llamar a los votantes del PP fascistas y quedarse tan anchos es una moda bastante arraigada en nuestro días en este país, esa moda que hace que los socialistas proclamen a los 4 vientos sus inclinaciones políticas, mientras que los votantes de otros partidos con inclinaciones tan a la derecha como a la izquierda están las del PSOE, tengan que permanecer un tanto en silencio.
Coincido con Ángel cuando dice que es "una declaración un tanto radical e incluso impropia" de la izquierda... aunque no sé yo.

En fin, se me quedan cosas en el tintero, xq este es un tema que suele dar que hablar. Gracias x leerme si lo haces y nada, un saludo para todos/todas desde Tenerife y nos volveremos a ver.
Ciao!!!
Anónimo ha dicho que…
Tanto a Angel como al fidelísimo colega tinerfeño tengo que deciros que es posible que a) yo no me haya expresado del todo claramente, o bien b) vosotros no hayáis entendido lo que digo cuando hablo de "huestes pseudoneofascistas". O tal vez no hayáis leído la frase completa, que habla de que "ciertas decisiones y actitudes zapateriles le proporcionan a las huestes pseudoneofascistas argumentos para el ataque visceral más corrosivo y erosionante". A quien, en todo caso, llamo "pesudoneofascistas" no es a los votantes del PP ni a los que profesan una ideología conservadora, sino a quienes, posibilitados para ello (o sea, clase política), acometen esos ataques que denomino "erosionantes, corrosivos y viscerales". Me refiero a personajes concretos, no al pueblo que los eligió. Y no creo que "peperos" sea un término despectivo; es simplemente una forma abreviada de decir "dirigentes del PP", como cuando uno se refiere a los socialistas como "sociatas", que es más económico, lingüísticamente hablando. A todos, gracias por seguir ahí, pues, sin vosotros, no tendría ánimos para mantener este espacio.

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